La colección Drive de Cartier se dirige a hombres con una independencia y un estilo decididos. Elegante en todas las circunstancias, el hombre Drive de Cartier es un esteta que vive la vida con naturalidad, que va del estilo casual y elegante al esmoquin. Como él, su reloj presenta distintas facetas. Tras el reloj Drive de Cartier horas minutos y segundos, el modelo segundo huso horario y el modelo tourbillon volante, la colección se enriquece con dos nuevos rostros, equipados con exquisitos movimientos de relojería.
Estos dos relojes, expresiones de un mismo estado de ánimo, presentan códigos muy personales y traducen el gusto por lo auténtico del hombre Drive de Cartier, su espíritu audaz y su fantasía. Ambos se traducen su arte de vivir, escenificado por Cartier en el Palazzo Gondi de Florencia con ocasión de la última edición del Salón Pitti Uomo.
- Fases Lunares:
Este reloj, equipado con el nuevo movimiento Manufactura 1904-LU MC, se distingue por su presentación de las fases lunares a las 6 horas. Esta complicación reproduce el ciclo del astro de la noche al ritmo de la luna nueva, del cuarto creciente, de la luna llena y del cuarto menguante. Un reloj preciso, que recibe el apelativo de “astronómico”, ya que solo necesita una corrección de un día cada 125 años. Fiel a la estética de la colección Drive de Cartier y a sus signos de identidad: el confort de uso, el perfil de la caja, el cristal abombado, la pureza de la esfera con guilloché blanco…, el reloj Drive de Cartier Fases Lunares se declina en una versión de oro rosa o acero, y opta por el refinamiento mecánico actual y por la naturalidad.
- Extraplano:
De un refinamiento extremo, diseñada para ceñirse en la muñeca y deslizarse discretamente bajo la manga de un esmoquin, esta nueva versión propone la sobriedad al servicio de la elegancia. Un 40 % más fino que el modelo original, su grosor inferior a 7 mm hace del estilo depurado su protagonista. La esfera satinada efecto rayos de sol, el cristal de zafiro plano y la finura de la pulsera de aligátor: todos estos elementos contribuyen a su pureza y subliman con elegancia la forma cojín de la caja del reloj. Sobrio, extraplano y más pequeño, inaugura un nuevo tipo de uso para la colección: el del reloj de noche para hombre. El reloj Drive de Cartier Extraplano está equipado con el movimiento mecánico de cuerda manual 430 MC y se presenta en una versión de oro rosa o en edición limitada de 200 piezas de oro blanco.