La céntrica Calle Zurbano de Madrid ha sido elegida como una de las doce mejores calles de Europa, uno de los “mejores lugares” de la ciudad, según el prestigioso diario estadounidense “The New York Times”. Un punto de interés de esta calle para cualquier turista es el hotel de cinco estrellas como el AC Santo Mauro*****, un edifico histórico ubicado en el corazón de Madrid y que cuenta con el sello de Autograph Collection.
Situado en el barrio de Chamberí y rodeado de jardines centenarios, el AC Santo Mauro se encuentra a poca distancia del Paseo de la Castellana y muy cerca del centro histórico y artístico de la capital. Lo mandó construir el Duque de Santo Mauro al arquitecto francés Louis Legrand, siendo terminado en el año 1.894. A finales del siglo XIX la zona era la favorita de la nobleza para levantar sus palacios como reflejo de su riqueza. De esta manera, se edificó la magnífica residencia del Duque de Santo Mauro para más tarde convertirse en la Embajada de Filipinas.
La remodelación definitiva como hotel fue encargada al arquitecto catalán Joseph Joan Pera, quien supo conjugar el diseño de vanguardia que caracteriza tanto al mobiliario como a la decoración interna, con el estilo decimonónico del edificio. Del antiguo palacio del Duque queda intacta la biblioteca, convertida hoy en el restaurante del hotel, y las habitaciones ovaladas con las grandes ventanas que dan acceso directo a la terraza, reminiscencias de la antigua elegancia francesa en un entorno vestido del confort más sofisticado.
Un total de 49 habitaciones, todas ellas diferentes, están repartidas dentro de un marco arquitectónico compuesto por dos palacetes rodeados de frondosos exteriores. En verano, éstos se habilitan como restaurante y bar, lo que los convierte en un lugar de reunión de inmenso atractivo en el que el tiempo parece detenerse.
En la primera planta se encuentran la mayoría de las suites, destacando la Suite Presidencial y la Suite de Lujo. El viejo establo fue transformado en dos habitaciones, incluyendo dos Suites Duplex. El Pequeño Palacio anexo se convirtió en parte del hotel en una reforma llevada a cabo en 2002, sumando 17 habitaciones para alcanzar las 49 con las que actualmente cuenta. Contiene principalmente habitaciones superiores, suites junior y habitaciones dobles estándar. También se encuentra aquí la suite presidencial. Muchas habitaciones presentan techos altos y chimeneas. En esta reforma se añadieron también la piscina cubierta, la sauna y el baño turco.
A mediados de 2011, se produce una remodelación que aporta una nueva imagen a los salones y áreas comunes, con una decoración que evoca el estilo y la época en la que se construyó el palacio. Con el sello del afamado interiorista español Lorenzo Castillo, los tres salones principales del hotel (el antiguo salón embajada, la pinacoteca y el salón gris) pasan a convertirse en el salón Rojo, salón Chino y salón (bar) Chivas, respectivamente. En ellos puede degustarse desde hace unas semanas la última apuesta del hotel, una nueva carta de bar para un rico, elegante y asequible picoteo. Además, en esta reforma se actualizan también el hall y la recepción.